Cuando seis meses después de graduarse como Eslabón Katerina acude a Sector Omega en una misión de reconocimiento, no esperaba que su vida se fuera a tambalear por completo. Lo que creía cierto se desdibuja en una mentira frente a sus ojos y la arrastra, junto a su relación con Alec, a una vorágine de incertidumbre constante. Su trabajo como agente de seguridad peligra desde el momento en el que decide esconder a un fugitivo y la poca estabilidad que había encontrado en su nueva vida se desmorona a pasos agigantados.
Mientras finge que todo va bien, los misteriosos encargos alrededor de la figura de los Corvette los llevan a tantos callejones sin salida que es inevitable sospechar de la existencia de un plan mayor detrás del sistema de sectores. Es entonces cuando Katerina se reencuentra con una de sus peores pesadillas, que la obligará a llegar hasta el límite para proteger a sus seres queridos.